Sobre la disculpa pública que realizó el día de hoy la PGR a Jacinta Francisco, Alberta Alcántara y Teresa González, tres indígenas Hñahñu acusadas injustamente de haber secuestrado a seis elementos de la AFI en el año 2006 y sentenciadas a 21 años de cárcel, la diputada Candelaria Ochoa señaló que la trascendencia de este evento “sienta precedentes para que cualquier acto de impunidad que vuelva a suceder tenga que ser reconocido públicamente como un error”.
Candelaria Ochoa dijo que de ninguna manera es suficiente una disculpa y que quienes las acusaron, detuvieron, procesaron y sancionaron deben ser sancionados, además de que el Estado mexicano debe reparar el daño: “lo que pasó con ellas fue una violación a los Derechos Humanos, en toda la extensión de la palabra”.
La diputada de Movimiento Ciudadano dijo que el perjuicio hecho a las indígenas fue más allá de los 3 años que vivieron en prisión, pues también se les dañó socialmente, por lo que el gobierno mexicano debe de tomar otras acciones que vayan más allá del evento histórico del día de hoy.
“Malditos y mil veces malditos esos que participaron y fueron parte de ese artilugio para acusar a Jacinta, Alberta y Teresa”