Este jueves 29 de junio, en el marco del convenio de colaboración entre el Gobierno Municipal de Zapopan y la oficina de la UNESCO en México, se llevó a cabo en el Colegio de Jalisco, el Segundo Conversatorio sobre Derechos Culturales, donde tuvo una importante participación Candelaria Ochoa Ávalos, académica y Diputada Federal Ciudadana.
Ella abordó el tema de los Derechos Culturales desde la perspectiva de la igualdad de género que es su especialidad. Dijo que “Para empezar, la igualdad de género en el mundo cultural, no se ha reconocido suficientemente, aun cuando las mujeres son productoras y consumidoras de bienes culturales”. Por ello enfatizó que es imperante incorporar estrategias y medidas en las políticas culturales de las administraciones públicas, que fomenten la participación de las mujeres de manera directa o indirecta en todas las fases del proceso cultural, ya que reiteró, “las mujeres han sido grandes constructoras de la vida cultural”.
Candelaria Ochoa señaló que de acuerdo a la UNESCO, la igualdad de género puede ser decisiva para ampliar la definición de patrimonio cultural y aumentar su alcance y significado para beneficio de toda la sociedad.
Se mostró de acuerdo con lo dicho por la filósofa Eli Bartra, quien manifestó que se requieren estudios sobre el significado del arte, la cultura y el patrimonio, qué significa para la gente que lo produce. “Porque hasta muy recientemente, como cultura y patrimonio sólo se valoraba de manera tangible, los monumentos históricos y la alta cultura, y no el arte que se transmite de generación en generación y que muchas de las veces es utilitario e intangible”.
La Diputada Ciudadana aplaudió el esfuerzo del Gobierno de Zapopan por desarrollar ejercicios como el presente sobre Derechos Culturales e hizo una última reflexión: “Quiero terminar diciendo que el arte popular o de las élites, es realizado por hombres y mujeres de diferentes edades, etnias y preferencias sexuales. El arte y la cultura son actividades que aún no son reconocidas como importantes y las y los artistas populares o de arte culto, pasan grandes penurias antes de ser reconocidos, por ello, un gran paso es reconocer la cultura en el sentido más amplio y como lo retoma la Declaración de Hangzhou, parte del desarrollo sostenible y el fomento de su conservación en futuras generaciones”.